sábado, octubre 01, 2011

ADIÓS JORGITO

Cuanto tiempo sin escribir. Tengo muchas cosas en mi cabeza que quiero compartir pero creo que debería empezar por terminar de contar la historia de Jorgito. La mañana siguiente de recoger a Jorgito me levanto pronto para echarle un vistazo. La noche anterior mientras le daba de comer aprendí un par de cosas. Los pájaros en el nido no son como los cachorros de perro o gato, esto es, no necesitan comer cada tres horas, no hay que despertarles, tienen sueño y quieren dormir. Y no hay que atufarles a comida, incluso lo que a nosotros nos puede parecer muy poco para ellos es más que suficiente.
Echo un vistazo a Jorgito y enseguida me doy cuenta de que algo no va bien. Está completamente hinchado, es literalmente un globo. Toda la piel que le rodea está tan hinchada que las plumas se han separado y veo perfectamente a través de la piel su frágil y rosado cuerpecito. Incluso la cabeza está hinchada. Busco en google y la red dice que es común cuando el pájaro sufre de falta de vitaminas. Pero sé que éste no es el caso. Jorgito se ha caído del nido ayer, estoy segura que sus padres le han alimentado bien, y por ahora está espabilado y lleno de energía, aunque noto que su movilidad no es la misma, pero no le noto débil sino incómodo. Acondiciono una caja de zapatos y me lo llevo al veterinario.
Mi veterinario no está, se ha ido de vacaciones así que está la suplente que no tiene ni idea de lo que le pasa. Decidimos que hay que pinchar la burbuja y aplicar pomada con penicilina en los agüjeritos. Así que con esa idea voy a casa y me hago con el siguiente material:

- agujas para diabéticos, son finísimas, perfectas para perforar la piel de Jorgito
- alcohol de farmacia, para desinfectar las agujas antes de pinchar
- pomada de penicilina para aplicar en la perforación.

Esto es lo que hago:

Limpio bien la aguja de diabéticos con un algodón empapado en alcohol y cojo al mirlo con la mano izquierda, con ese pulgar aparto muy suavemente unas plumas para dejar la zona a perforar a la vista. Es muy importante la posición de la aguja a la hora de pinchar. No es como pinchar un globo, la aguja no puede ir frente a la piel, si el pájaro se mueve tenemos un incidente desagradable. Hay que ir en paralelo al cuerpo. Podemos hacer un agujero de entrada y salida, casi como dar una puntada. Hay que hacer esta operación con mucha calma,mucha paciencia, lentamente.
Pronto me doy cuenta de que no hay una sola burbuja si no muchas pequeñas: la parte de atrás de la cabeza, el pecho, la espalda, los muslos, en total 6 ó 7. Cada vez que hago un agujero, lo tapo después con un poquito de pomada con penicilina. Según las burbujas pierden aire noto que Jorgito está más activo y se encuentra más agusto. Entonces aprovecho y le doy de comer. Le observo a lo largo del día y veo que está bien y le doy de comer cada hora y media.

A la mañana siguiente Jorgito es un globo de nuevo, la lógica me dice que las burbujas se hinchan con la respiración de Jorgito, es decir, que tiene la pleura perforada, tal vez por una costilla rota y que de ser así no hay mucho que pueda hacer por él. Cada día sigo con mi rutina de perforar las burbujas y dar de comer y beber a Jorgito, pero veo que respira con dificultad y que ha perdido peso. Una mañana noto que sólo le quedan unas horas. Decido sacarle a la terraza, encima de una mesa acomodo con unos paños algo parecido a un nido y le cubro un poco para que esté relajado y tranquilo. Es muy triste. Da bocanadas intentando llenar sus pequeños pulmones pero es en vano. Quiere incorporarse cuando escucha otros mirlos llamándole pero no tiene fuerzas. Poco a poco se rinde. Unos minutos después, que se me hacen eternos, todo ha terminado.

Jorgito, he aprendido mucho de tí, comparto lo que me has enseñado por si alguna vez alguien encuentra otro pájaro caído del nido. Estoy segura de que ésta vez Jorgito saldrá volando.

1 comentario:

  1. Me ha encantado como cuentas esta triste historia, es admirable tu amor por los animales. Sabes? los budistas dicen que cuando morimos y llegamos a las puertas del cielo, los que nos juzgarán para permitirnos el acceso o denegarnoslo serán todos los animales con los que nos habremos relacionado a lo largo de nuestra vida... a ti esta claro que te pondrán una alfombra roja, enhorabuena y gracias.

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